jueves, 16 de octubre de 2014

"La mujer de blanco"

Recuerdo que la tarde estaba tranquila y nublada; la atmósfera de Londres se encontraba en su punto más cargado y el lejano murmullo del tráfico en el más débil; el pequeño latido de vida de mi interior y el gran corazón de la ciudad que me rodeaba parecían apagarse al unísono, cada vez con mayor languidez, según se ponía el sol. Me espabilé, dejé el libro con el que, más que leerlo, estaba perdido en ensoñaciones y salí de mis habitaciones para tomar el fresco aire nocturno de las afueras. Wilkie Collins, "La mujer de blanco" 
(cuadro: From Pentonville Road Looking West, London, Evening by John O'Connor)

No hay comentarios:

Publicar un comentario