“Cómo podrías renacer sin antes haber quedado reducido a ceniza.”-Friedrich Nietzsche.
Las caídas son duras pero necesarias. ¿Cómo habrías aprendido a andar en bicicleta o en patines sin sufrir una caída o golpe alguno?, imposible ¿verdad?, lo mismo pasa en cada aspecto de tu vida.
Muchas personas que están a punto de tomar el camino del emprendimiento experimentan el mismo temor, ese temor a fallar, a fracasar y si este temor a equivocarte es permanente entonces no estás preparado para tener avance alguno en tu vida.
La base de nuestro aprendizaje es el error, de esta manera es como ganamos experiencia y nos enteramos de cómo no hacer las cosas en una próxima ocasión, nos enriquece, nos fortalece y nos permite avanzar. Ya lo decía John F. Kennedy, “El éxito tiene muchos padres pero el fracaso es huérfano”.
Si analizas las historias de muchos de los personajes que han tenido éxito, antes de llegar a él, pasaron por derrotas y fracasos, desde estrategas bélicos y gobernantes hasta científicos y empresarios, todos ellos dotados de confianza en sí mismos y en sus sueños y objetivos.
El fracaso es el mejor amigo del éxito, jamás los podrás separar. El fracaso es ese amigo que te ayuda impulsándote, diciéndote que el camino que estás tomando no es el correcto. El está ahí para guiarte y depende de ti que aproveches ese aprendizaje aunque en ocasiones nos cueste mucho aceptarlo y por más que lo rechacemos debemos escucharlo para llegar a nuestra meta.
Lo interesante del viaje no es el destino, es el viaje en sí mismo. ¿Te imaginas que cada cosa que hicieras o desearas lo pudieras lograr en el primer intento?, sería muy aburrido y lo peor es que no habría ningún avance, ningún aprendizaje. Ese viaje, ese trayecto a tu destino estará lleno de aventuras buenas y malas, de obstáculos, de sonrisas y de lágrimas, de pruebas y de enriquecedores errores, date la oportunidad de crecer, de experimentar, de avanzar…date la oportunidad de vivir.
Si buscas no fallar, buscas no triunfar.
Date la oportunidad de conocer al fracaso y aprender de el. Escúchalo con atención pero no lo tomes como filosofía de vida y menos como una forma de pensar permanente, el fracaso está ahí sólo como una guía.
Para muestra, te compartimos una pequeña lista de personas exitosas que se dieron la oportunidad de crecer y avanzar al conocer el fracaso:
1. Henry Ford: antes de crear la famosa empresa de autos, Ford Motor Company, Henry Ford estuvo en bancarrota 5 veces.
2. Walt Disney: antes de ser conocido mundialmente por sus parques de atracciones e historias, Walt Disney, comenzó una serie de negocios y fracaso en todos, llevándolo a la bancarrota.
3. Albert Einstein: comenzó a hablar a los 4 años y a leer a los 7. Los maestros pensaron que tenía un retardo mental, era anti-social y lento. Eventualmente lo expulsaron de la escuela.
4. Thomas Edison: el creador de la bombilla. Los maestros le decían que era muy tonto para aprender lo que fuera. Al final, después de 1000 intentos fallidos, creo la famosa bombilla.
Y no olvidemos de las mujeres…
1. Marylin Monroe: las agencias de modelaje le decían que debería mejor considerar ser secretaria.
2. Oprah Winfrey: conocida mundialmente por su impacto en la televisión y como una de las mujeres más ricas y exitosas en el mundo, viene de una infancia golpeada por el abuso sexual. Falló en terminar su grado académico por un crédito y fue despedida como ancla de televisión por ser muy emocional.
3. Elizabeth Arden: conocida por su imperio de cosméticos, Elizabeth Arden, no terminó sus estudios académicos y encima fracasó varias veces tratando de vender cremas faciales.
4. J.K. Rowling: conocida por su libro Harry Potter, lo que muchos no saben es que su libro fue rechazado ¡12 veces!
Así que definitivamente si quieres éxito, prepárate para el fracaso. El secreto sólo está en la manera de cómo lo manejas, siempre hazlo a tu favor, siempre como un motor de impulso y jamás le permitas apagarte el interruptor.
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