martes, 15 de abril de 2014

Nuestras emociones fueron “diseñadas” por la selección natural para influir decididamente en nuestra percepción y pensamientos.

http://enbuscadeantares.com/2014/04/15/el-miedo-puede-cambiar-la-realidad/ 

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Nuestras emociones fueron “diseñadas” por la selección natural para influir decididamente en nuestra percepción y pensamientos.
¿Con que objetivo?
Bueno, considerando que el fin de la evolución es la supervivencia del más fuerte, así como que este logré pasar sus genes a una futura generación, podemos decir en términos generales que los humanos nos emocionamos para acercarnos a elementos que nos aproximen a esta meta y para alejarnos de aquellos que la ponen en riesgo.
Es así, que como su etimología lo dice, las emociones no son otra cosa queenergía que motiva o impulsa un comportamiento o una acción que nos permite “…prepararnos y hacer frente, rápidamente, a los acontecimientos vitales de nuestras vidas” Paul Ekman.
Pero como para la selección natural siempre fue mejor “pedir perdón que pedir permiso” (better save than sorry), en muchas ocasiones nuestra mente puede engañarnos sobre lo que vemos. De hecho, a veces solo es necesario un estímulo para determinar lo que percibimos.
¿Qué les parece si vemos lo anterior con un ejercicio?
A continuación les presento tres enlaces a tres diferentes imágenes. El objetivo del ejercicio es dar clic en cada uno de estos y apenas aparezca la imagen, usted debe decir mental o verbalmente (en un segundo o menos) qué es lo que ve. Insisto, no lo piense, simplemente responda lo más rápido que pueda.
Pero ALTO; antes de iniciar es importante que usted de play a cualquiera de los videos que aparecen abajo y que suba el volumen de su computadora o dispositivo móvil lo más que pueda (de forma que cuando usted vea las imágenes la música se esté escuchando). De igual forma y para controlar un poco más el ambiente de este sencillo experimento, intente que al realizarlo usted este solo y si es de noche, mucho mejor.
Ahora sí; adelante.
¿Qué tal?, ¿Cómo les fue?
Este sencillo ejercicio fue realizado por investigadores de la Universidad de la Ciudad de Nueva York que querían demostrar que cuando se induce el miedo en un individuo, la perspectiva de este tiende a cambiar considerablemente.
Es evidente que un cocodrilo, una serpiente y un hacha, son elementos que, de alguna u otra forma, relacionamos con peligro, y su usted respondió de esta forma en tres o dos ocasiones, no se preocupe; no es que sea un miedoso sino que su cerebro simplemente se comportó conforme la evolución lo programó.
Cabe señalar también que en la investigación “Alligator or squirrel: musically induced fear reveals threat in ambiguous figures”, los académicos mostraron estas mismas imágenes a diferentes personas pero bajo tres diferentes situaciones: con música alegre, sin música y con música del tipo película de terror.
En los resultados, la música alegre no tuvo la capacidad de influir considerablemente en comparación al grupo que no escuchó nada (las personas veían casi aleatoriamente una ardilla que un cocodrilo, una serpiente que una cuerda y un hacha que una olla), pero en el conjunto de personas que escucharon música tenebrosa la influencia sí fue determinante como se puede observar en la siguiente gráfica:
Resultados
En conclusión, no solo la “selección natural no nos “diseñó” para ver la “realidad”claramente (algo que podemos entender cuando confundimos algo que pasa por el suelo con un animal o una sombra en la noche con la silueta de una persona) sino que cuando consciente o inconscientemente sentimos que nuestra integridad está en riesgo, nuestra capacidad de percepción se limita aún más.
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Fuente Consultada:
  • Wright, Robert. Course “Buddhism and Modern Psychology”. Princeton University 2014.

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